Cómo enfrentar la Depresión: datos y tratamientos

15/07/2024
Descubre cómo identificar la depresión, sus causas y los tratamientos más efectivos. Mejora tu bienestar emocional con nuestra guía.
Depresion

La depresión es un problema de salud que causa tristeza prolongada, pérdida de interés en las actividades, cansancio, cambios en el apetito y dificultad para concentrarse. Este trastorno del estado de ánimo puede afectar seriamente tu vida diaria y cómo funcionas.

En Chile, la depresión ha aumentado en los últimos años. Según el Ministerio de Salud, en 2021, un 22% de los adolescentes tenía síntomas de depresión. Durante la pandemia de COVID-19, las consultas por depresión en el sistema de salud público aumentaron un 20%. Esto resalta la importancia de entender y tratar esta condición.

¿Qué es la depresión?

La depresión es un trastorno del estado de ánimo que afecta cómo te sientes, piensas y realizas tus actividades diarias. Puede variar desde leve hasta depresión grave, donde es difícil hacer incluso las tareas más simples. No es solo tristeza; es una condición que necesita tratamiento.

Las personas con depresión clínica pueden sentir que la vida no tiene sentido. Este estado puede durar semanas, meses o incluso años si no se trata. Además, la depresión puede causar dolores físicos, problemas digestivos y trastornos del sueño. Es esencial diferenciar entre una tristeza temporal y un trastorno depresivo que requiere intervención.

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Tipos de depresión

Existen varios tipos de trastornos depresivos, cada uno con sus propios síntomas:

  • Trastorno depresivo mayor: Se caracteriza por episodios de depresión intensa que duran al menos dos semanas y afectan la capacidad de funcionar. Las personas pueden sentirse abrumadas por sentimientos de desesperanza, pérdida de energía y pensamientos negativos.
  • Trastorno depresivo persistente (distimia): Es un estado de ánimo bajo que dura al menos dos años. Aunque los síntomas pueden ser menos graves, interfieren significativamente con la vida diaria.
  • Trastorno afectivo estacional (TAE): Ocurre durante los meses de invierno cuando hay menos luz natural. Los síntomas incluyen fatiga, aumento de peso y tristeza. Puede tratarse con terapia de luz.
  • Trastorno bipolar: Aunque no es un tipo de depresión, las personas con trastorno bipolar experimentan episodios de depresión profunda alternados con manía o hiperactividad. Requiere un tratamiento específico que puede incluir estabilizadores del ánimo y terapia psicológica.
  • Trastorno disfórico premenstrual (TDPM): Afecta a mujeres en la fase lútea del ciclo menstrual, causando síntomas graves de depresión, ansiedad e irritabilidad.
  • Depresión posparto: Afecta a algunas mujeres después del parto, provocando tristeza extrema, ansiedad y fatiga.
  • Trastorno depresivo inducido por sustancias: Se refiere a la depresión causada por el abuso de drogas o alcohol o como un efecto secundario de ciertos medicamentos.

Cada tipo de depresión necesita un enfoque específico para su tratamiento. Es crucial obtener un diagnóstico adecuado de un profesional de la salud mental.

Causas de la depresión

Las causas de la depresión son variadas y pueden incluir factores de riesgo genéticos, biológicos, ambientales y psicológicos:

  • Genética: Tener familiares con trastornos mentales puede aumentar el riesgo de desarrollar depresión.
  • Sustancias químicas en el cerebro: Los desequilibrios en neurotransmisores como la serotonina, dopamina y norepinefrina pueden contribuir a la depresión.
  • Factores ambientales: Eventos estresantes, como la pérdida de un ser querido o problemas económicos, pueden desencadenar la depresión en personas predispuestas.
  • Trastornos mentales coexistentes: Las personas con ansiedad, trastorno bipolar u otros problemas mentales son más propensas a desarrollar depresión.
  • Eventos traumáticos: Experiencias traumáticas, especialmente en la infancia, pueden aumentar el riesgo de depresión más adelante en la vida.
  • Problemas de salud física: Condiciones crónicas como el dolor constante, enfermedades cardíacas o problemas hormonales pueden desencadenar o agravar la depresión.
  • Estilo de vida: La falta de ejercicio, una dieta poco saludable y el consumo de alcohol o drogas pueden aumentar el riesgo de depresión.
  • Cambios hormonales: Especialmente en mujeres, los cambios hormonales relacionados con el ciclo menstrual, el embarazo, el posparto y la menopausia pueden desencadenar la depresión.

Entender las causas de la depresión es clave para un tratamiento efectivo. Identificar los factores de riesgo ayuda a tomar medidas preventivas y personalizar el tratamiento.

Síntomas de la depresión

Los síntomas de la depresión pueden variar de una persona a otra, pero los más comunes incluyen:

  • Cambios en el apetito o peso: Pérdida o aumento de peso sin razón aparente.
  • Problemas de sueño: Insomnio o dormir en exceso (hipersomnia).
  • Fatiga o falta de energía: Cansancio extremo que dificulta las actividades diarias.
  • Pérdida de interés en actividades: Falta de interés en hobbies o relaciones sociales.
  • Sentimientos de culpa o inutilidad: Sensación de culpa o inutilidad sin razón aparente.
  • Dificultad para concentrarse o tomar decisiones: Problemas para concentrarse o tomar decisiones.
  • Pensamientos de muerte o suicidio: Estos son síntomas graves que requieren atención inmediata.
  • Irritabilidad o frustración: Sentimientos de irritabilidad sin motivo claro.
  • Dolores físicos sin causa aparente: Dolores de cabeza, estómago y otros malestares sin explicación médica.

Es importante recordar que no todas las personas con depresión experimentan todos estos síntomas. La gravedad, frecuencia y duración de los síntomas pueden variar dependiendo del individuo y de su condición particular.

Diagnóstico y tratamiento

El diagnóstico de la depresión se realiza a través de una evaluación exhaustiva de los síntomas y su duración. Los profesionales de la salud mental, como psicólogos y psiquiatras, utilizan herramientas específicas para determinar si una persona tiene un trastorno depresivo.

El diagnóstico puede incluir entrevistas clínicas, cuestionarios de autoevaluación y, en algunos casos, pruebas de laboratorio para descartar otras causas médicas de los síntomas. Es fundamental que el diagnóstico sea preciso para poder ofrecer el tratamiento más adecuado.

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Tratamientos tradicionales

El tratamiento de la depresión puede incluir varias opciones, dependiendo de la gravedad del trastorno y las necesidades del paciente:

  • Terapia cognitivo-conductual (TCC): Es un tipo de terapia que ayuda a cambiar pensamientos negativos y comportamientos que empeoran la depresión. La TCC se centra en identificar patrones de pensamiento disfuncionales y reemplazarlos por formas de pensar más positivas. Es efectiva para tratar casos leves a moderados y se ha demostrado que reduce los síntomas de la depresión a largo plazo.
  • Medicamentos: Los antidepresivos, como los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS), son medicamentos que pueden ayudar a mejorar el estado de ánimo al equilibrar las sustancias químicas en el cerebro. Es importante tomarlos según las indicaciones del médico y tener en cuenta que pueden tardar varias semanas en mostrar efectos. Los antidepresivos pueden ser una parte crucial del tratamiento, especialmente en casos de depresión moderada a grave.
  • Terapias combinadas: A menudo, una combinación de terapia y medicación es el enfoque más efectivo, especialmente en casos más graves. El uso de ambas estrategias puede abordar tanto los síntomas psicológicos como los biológicos de la depresión, proporcionando un enfoque integral para el tratamiento.
  • Terapia interpersonal (TIP): Esta terapia se centra en mejorar las relaciones personales y resolver problemas interpersonales que pueden estar contribuyendo a la depresión. La TIP puede ser particularmente útil para las personas que han experimentado eventos de vida estresantes o que tienen dificultades en sus relaciones.
  • Terapia electroconvulsiva (TEC): En casos de depresión severa o resistente al tratamiento, la TEC puede ser una opción. Este tratamiento implica la estimulación eléctrica controlada del cerebro y suele considerarse cuando otros tratamientos no han funcionado. Aunque es un procedimiento más invasivo, ha demostrado ser efectivo en casos graves.
  • Psicoterapia: Hablar con un terapeuta o consejero puede ayudar a las personas con depresión a explorar las causas subyacentes de su estado y desarrollar estrategias para lidiar con los síntomas. La psicoterapia ofrece un espacio seguro para expresar sentimientos y trabajar en soluciones prácticas.
  • Terapia de aceptación y compromiso (ACT): Esta es una forma de terapia que combina técnicas de aceptación y mindfulness con estrategias de cambio de comportamiento. La ACT ayuda a las personas a aceptar sus pensamientos y emociones sin juzgarse a sí mismas, y a comprometerse con acciones que mejoren su calidad de vida.

Es fundamental que el tratamiento sea personalizado, ya que cada persona experimenta la depresión de manera diferente. Lo que funciona para una persona puede no ser efectivo para otra, por lo que es crucial trabajar con un profesional de la salud mental para encontrar el plan de tratamiento adecuado.

Tratamientos alternativos

Además de los tratamientos convencionales, algunos pacientes encuentran alivio en terapias alternativas. Desde la legalización del cannabis medicinal en 2018, su uso ha aumentado entre aquellos que no han respondido bien a otros tratamientos. Aunque aún se están realizando estudios, algunas personas han encontrado útil el Aceite con cannabis, como el Aceite Narma, especialmente cuando se combina con otras terapias. Es esencial discutir cualquier tratamiento alternativo con un médico.

Otros tratamientos alternativos incluyen:

  • Suplementos dietéticos: Algunas personas con depresión han encontrado beneficios en el uso de suplementos como ácidos grasos omega-3, vitamina D y hierba de San Juan. Sin embargo, es importante consultar con un médico antes de comenzar cualquier suplemento, ya que pueden interactuar con otros medicamentos.
  • Terapias de relajación: Técnicas como la meditación, el yoga y la acupuntura pueden ayudar a reducir el estrés y mejorar el bienestar general, lo que puede ser beneficioso para las personas con depresión. Estas prácticas pueden complementar los tratamientos tradicionales al proporcionar alivio de los síntomas y mejorar la calidad de vida.
  • Terapia de luz: Especialmente útil para personas con trastorno afectivo estacional, la terapia de luz implica la exposición a una luz brillante que simula la luz solar. Esto puede ayudar a regular los ritmos circadianos y mejorar el estado de ánimo.
  • Ejercicio físico: El ejercicio regular ha demostrado ser efectivo para mejorar el estado de ánimo y reducir los síntomas de la depresión. La actividad física libera endorfinas, que son sustancias químicas que mejoran el ánimo y la sensación de bienestar.
  • Mindfulness y meditación: Practicar mindfulness o meditación puede ayudar a las personas a mantenerse en el presente y a reducir la rumiación, que es común en la depresión. Estas prácticas pueden mejorar la capacidad de lidiar con el estrés y los pensamientos negativos.

Es fundamental que cualquier tratamiento alternativo se utilice como complemento, no como reemplazo de las terapias convencionales, y siempre bajo la supervisión de un profesional de la salud.

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Preguntas frecuentes

¿Cuáles son los primeros síntomas?

Reconocer los primeros síntomas es importante para actuar a tiempo. Estos pueden incluir irritabilidad, cansancio, cambios en el sueño o el apetito, y sentimientos de desesperanza. Identificar estos signos temprano puede ayudar a prevenir que la depresión se vuelva más severa.

¿Cuál es la diferencia entre tristeza y depresión?

La tristeza es una emoción normal en situaciones difíciles, pero la depresión es un trastorno que afecta tu capacidad para realizar tus actividades diarias. La clave está en cuánto duran estos sentimientos y cómo afectan tu vida. La tristeza suele ser temporal, mientras que la depresión es persistente y puede durar semanas, meses, o incluso más.

¿Cuánto tiempo puede durar?

La duración puede variar. Algunas personas experimentan episodios de depresión cortos, mientras que para otras, la condición puede durar años. Sin embargo, con el tratamiento adecuado, muchas personas ven mejoras en su calidad de vida. La duración del tratamiento también puede variar, y algunos pueden necesitar apoyo a largo plazo.

¿Qué opciones de tratamiento existen?

Hay varias opciones, como la terapia psicológica, los medicamentos, cambios en el estilo de vida, y tratamientos alternativos como el cannabis medicinal. Es importante encontrar el tratamiento que mejor se adapte a ti. Consultar con un profesional de la salud es el primer paso para determinar el enfoque más efectivo.

¿Cómo apoyar a un ser querido?

Es importante ofrecer apoyo emocional, escuchar sin juzgar, y animar a la persona a buscar ayuda profesional. Estar informado sobre el tema también puede ayudarte a comprender mejor lo que está pasando. Apoyar a alguien con depresión requiere paciencia y comprensión, ya que pueden no siempre estar abiertos a la ayuda.

¿Es seguro tomar antidepresivos por mucho tiempo?

Para muchas personas, los antidepresivos son seguros y efectivos a largo plazo. Es fundamental seguir las recomendaciones del médico y ajustar el tratamiento según sea necesario. Los efectos secundarios deben ser monitoreados, y cualquier cambio en la medicación debe hacerse bajo la supervisión de un profesional.

¿La depresión se puede curar?

Algunas personas pueden recuperarse completamente con tratamiento, mientras que otras pueden necesitar manejar su condición a largo plazo. Lo importante es mantener un enfoque continuo con apoyo médico y psicológico. La recuperación puede ser un proceso, y es esencial tener expectativas realistas y un plan de tratamiento adecuado.

¿El ejercicio y la dieta pueden ayudar?

Sí, el ejercicio regular y una buena alimentación pueden mejorar tu estado de ánimo y energía. El ejercicio libera endorfinas, que son sustancias químicas que te hacen sentir bien, y una dieta equilibrada proporciona los nutrientes que tu cerebro necesita. Incorporar hábitos saludables puede ser una parte importante del tratamiento.

¿Cuándo debería buscar ayuda profesional?

Si los síntomas duran más de dos semanas y afectan tu vida diaria, es importante buscar ayuda. Un médico de atención primaria o un especialista en salud mental pueden guiarte hacia el tratamiento adecuado. No debes esperar a que los síntomas empeoren; buscar ayuda temprano puede hacer una gran diferencia.

¿Qué hacer en una crisis de salud mental?

En caso de emergencia, donde hay riesgo de autolesión o suicidio, actúa de inmediato. En Chile, puedes llamar a Fono Salud Responde (600 360 7777) o acudir a un servicio de urgencias. En Estados Unidos, puedes llamar o enviar un mensaje de texto al 988 para obtener ayuda. También puedes consultar con un especialista para un tratamiento personalizado en Narma.cl. Nunca es tarde para buscar ayuda, y hay recursos disponibles para apoyarte en situaciones de crisis.

Depresión y cannabis medicinal

El uso de cannabis medicinal ha aumentado desde su legalización en 2018. Aunque no es el primer tratamiento que se recomienda, algunas personas lo encuentran útil cuando otras terapias no han funcionado. Es importante hablar con un profesional de salud para ver si es adecuado para ti. El cannabis medicinal puede ser parte de un plan de tratamiento más amplio, pero siempre debe ser considerado bajo supervisión médica.

Instituciones de apoyo

En Chile, el Ministerio de Salud (MINSAL) y organizaciones como Fundación Chile Unido son recursos importantes para quienes buscan apoyo en salud mental. Fundación Chile Unido ofrece programas de apoyo psicológico y líneas telefónicas de ayuda para personas que están enfrentando crisis emocionales o situaciones de depresión.

El Ministerio de Salud también ofrece recursos y orientación a través de su plataforma en línea y centros de salud mental comunitarios, que brindan atención psicológica y psiquiátrica a nivel nacional. Estos servicios son accesibles para cualquier persona que necesite apoyo, independientemente de su situación económica.

Además, el Instituto Nacional de la Salud Mental (NIMH) en Estados Unidos es una de las principales instituciones que investiga y educa sobre trastornos mentales, incluida la depresión, y aunque no es chileno, sus recursos y estudios pueden ser útiles.

Para obtener más información sobre cómo acceder a estos recursos o cómo el cannabis medicinal puede ser parte de tu tratamiento, visita Narma.cl o contacta con nuestro servicio de Atención al Cliente. Te invitamos a agendar una cita médica con uno de nuestros especialistas para iniciar un tratamiento adecuado.

Actualizaciones de este artículo

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